Primera Mañana; Día de adoración

Oh Señor,

Tenemos contigo comunión todos los días,

Pero nuestros días hábiles, tan cargados del mundo,

Que las  preocupaciones seculares, reducen nuestras impresiones celestiales.

Por tanto, te bendecimos hoy por este día santo a nuestras almas

Es cuando podemos esperar en Ti y ser refrescados;

Te agradecemos por que hoy podemos acercarnos a Ti y Tú a nosotros.

Nos regocijamos por este otro día del Señor

Cuando distraemos nuestra alma de los cuidados de este mundo

Para poner atención a Ti sin distracción alguna;

Permite que nuestra devoción sea total,

Nuestro comportamiento edificante,

Nuestra lectura piadosa,

Nuestra escucha provechosa,

Que nuestras almas sean revividas y avivadas.

Estamos en la casa de oración,

Derrama sobre nosotros espíritu de gracia y suplica;

Estamos en la casa de alabanza,

Aviva en nosotros toda emoción alegre  y grata;

Estamos en la casa de instrucción,

Da testimonio a Tú palabra predicada,

Y glorifícala en los oídos de los que escucha,

Que esta pueda iluminar al ignorante,

Aviva al descuidado, reclama al errante,

Establece al débil, consuela al debilitado,

Alista al pueblo del Señor.

Dios, un santuario para aquellos que no pueden venir,

No te olvides de aquellos que nunca vienen,

Y otorga sobre nosotros

Benevolencia hacia nuestros dependientes,

Perdón hacia nuestros enemigos,

Pacifismo hacia nuestros vecinos,

Y apertura hacia nuestros compañeros cristianos.

Por medio de Cristo Jesús, Amen.

Traducido no oficialmente del Valle de la visión Pagina 378.

Anderson E. O´campo